La profesión de abogado ha cambiado radicalmente los últimos 20 años puesto que las nuevas tecnologías han facilitado su modernización. Hace unos años se implantó el sistema lexnet para presentar y recibir escritos y notificaciones, y todo ello ha provocado que todos los trámites sean más ágiles y más directos. Además, a ello se le debe de sumar que aprovechamos más los recursos como el tiempo ya que no debemos de movernos de nuestro despacho para trámites supérfluos.
El Covid también ha ayudado que la justicia se haya tenido que poner las pilas para modernizarse puesto que ahora se permite la presencia telemática en varios señalamientos de juicios.